El objetivo es verificar las ventas de combustibles mediante un procedimiento de control de caja, conocido como “punto fijo”, que permitirán estimar las ventas, para compararlas con las declaradas por los establecimientos y detectar si existen maniobras de evasión. Además, se están realizando control de facturación y relevamiento de personal.
Con la información que se obtenga, la AFIP realizará cruces sistémicos de datos sobre la cantidad de combustible recibido con el expedido, y los datos del nivel de facturación se cotejarán con los del proveedor de los combustibles.
Los controles permitirán verificar si hay casos de evasión en las estaciones de servicio que no realizan ventas con tarjetas de crédito y débito.
Además, la AFIP estará verificando la información recibida a través de las denuncias presentadas por ciudadanos por falta de entrega de ticket o documentación equivalente.
En tanto, se prevé que la AFIP extienda los controles durante los próximos días.