El convenio establece que ambas instituciones participarán en el diseño e instrumentación de programas con el fin de obtener una adecuada inclusión social de las personas en conflicto con la ley penal. El acuerdo tiene como enfoque central la reinserción social de los tutelados, desde una perspectiva de derechos humanos.
“La firma de este convenio favorece un trabajo conjunto entre las distintas áreas del Estado en pos de promover estrategias de prevención del delito y el diseño de políticas públicas que faciliten el acceso y goce igualitario a derechos”, sostuvo el jefe comunal. “Hemos asumido el compromiso de coordinar y articular los recursos territoriales”, agregó.
Del acto de firma participaron el subsecretario de Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, Sebastián Pereiro, y el presidente del Patronato de Liberados, Fabián Leonardi. Por parte del Municipio, acompañaron al intendente el coordinador general de Gobierno, Diego Buffone; el subsecretario de Derechos Humanos, José Estevao; y la subsecretaria de Género y Familia, Ileana Lingua.
Entendiendo la importancia de revalorizar el trabajo como una estrategia de prevención del delito y como un instrumento de integración y emancipación indispensable para la construcción de un proyecto de vida, en la cláusula tercera la Municipalidad se compromete a incluir a las personas en conflicto con la ley penal en todo programa de capacitación laboral y de oficios que desarrolle.
Asimismo, la cláusula cuarta estipula que el Patronato podrá derivar a la Municipalidad a aquellas personas que deban realizar tareas comunitarias no remuneradas en cumplimiento de sus respectivas penas o pruebas por disposición judicial, de acuerdo a lo establecido por el artículo 184° de la Ley N° 12.256.
El Patronato de Liberados es un organismo público orientado a la prevención del delito a través de la creación de políticas que promuevan la inclusión social. La labor interinstitucional y la atención conjunta de la problemática permiten el fortalecimiento de los proyectos personales y familiares de la población supervisada, lo que impacta positivamente en la disminución de la reincidencia.